Fragmentos y comentarios de algunas lecturas

sábado, 22 de marzo de 2014

101 historias NBA - Gonzalo Vázquez



     Hace ya bastantes años que el periodista Gonzalo Vázquez (Barakaldo, 1973) viene sorprendiendo a los aficionados a la NBA con sus excelentes artículos, enormemente variados y elaborados con inusual cuidado. 101 historias NBA recopila muchos de tantos buenos trabajos atendiendo a un criterio de selección muy concreto, en el que no cobra tanta importancia lo acontecido en la pista como las historias de diferentes protagonistas del juego fuera de ella. Como bien adelanta el título de la obra, no estamos ante una recopilación de artículos sobre el juego en un sentido estricto, leeremos historias.

     La realización de 101 historias NBA supone  un enorme trabajo de recopilación y elaboración de información realizado por Gonzalo Vázquez a lo largo de años de actividad profesional, que acompaña con el mejor conocimiento de la historia de la NBA de nuestro país. No tengo ninguna duda sobre ello. Caben en la obra narraciones de lo más variadas en contenido y amplitud; así encontraremos muchas historias cortas, de apenas dos o tres páginas, en ocasiones más que suficientes para sobrecogernos como las protagonizadas por Chris Mullin, Bill Walton, Isiah Thomas, Bobby Hurley, Anthony Hunter o Rick Mahorn entre otras, pero donde realmente esta recopilación adquiere un enorme valor es en aquellos capítulos más extensos, donde el autor ha ido más lejos tratando de arrojar luz sobre episodios desconocidos y ha realizado un mayor esfuerzo en la composición narrativa. Uno de los puntos fuertes de la obra. Así, capítulos como los dedicados a James Naismith, Jerry Sloan, Willis Reed, Randy Smith, Spencer Haywood, John Brisker, Larry Bird, Magic Johnson, Len Bias, Manute Bol, Hakeem Olajuwon, Chauncey Billups o Brandon Roy entre muchos otros, son ejemplo del cuidado que Gonzalo Vázquez pone en la narración y la composición de sus artículos, en el dibujo del contexto y  sus protagonistas, además de la valentía que supone atreverse a novelizar alguna de estas historias logrando así una implicación extra del lector pero sin olvidar la atadura a un imprescindible rigor. Tan sólo en el último capítulo del libro el autor libera completamente la ficción para rendir un sentido homenaje  al creador del juego, James Naismith, cerrando así la obra con el mismo protagonista con el que la inicia.  Y quizás no guste a todos este último capítulo, posiblemente demasiado desatado, pero particularmente me encanta, tanto por el texto en sí como por la pretensión de trazar un dibujo que atraviese la obra y ésta se sobrepase a sí misma como conjunto, de la misma forma en que lo hacen muchos artículos de forma independiente.

James Naismith


     Para aquellos que procuramos atar en corto el trabajo de Gonzalo Vázquez, una reunión tan extensa de sus artículos en un libro es de agradecer. Desde una óptica menos egoísta, tengo que decirlo, semejante extensión me parece un error editorial. Esta es una obra de enormes posibilidades fuera de su ámbito más natural -el aficionado al baloncesto- pero un volumen de algo más de seiscientas páginas puede hacer que posibles lectores de estas historias no familiarizados con este deporte se sientan intimidados, diría que con cierta razón.

     En suma, 101 historias NBA es un libro que merece toda la atención que se le pueda prestar de la mano de un excelente periodista, muy escrupuloso con su trabajo, en absoluto autocomplaciente –escribirá aún mejor con el tiempo, seguro- y de enorme curiosidad y pasión por el juego. El caso es que antes de leer el libro estas cosas ya las sabía, pero uno se sorprende igual. Incluso los lectores mejor acostumbrados no acabamos nunca de acostumbrarnos.

Gonzalo Vázquez

sábado, 15 de marzo de 2014

Estrellas y borrascas - Gaston Rébuffat



     Estrellas y borrascas, editado por Desnivel y traducido por José Isidro Gordito, es un clásico entre los libros de montaña. Publicado por primera vez en 1954, su autor, el francés Gaston Rébuffat (1921-1985) fue uno de los mejores alpinistas de su generación y el primero en completar la ascensión a las seis caras norte más importantes de los Alpes. Tras una acertada presentación a cargo de Lord John Hunt, jefe de la expedición británica al Everest de 1953, este breve librito narra en episodios independientes las ascensiones de Rébuffat a estas seis caras norte: El espolón Walker de las Grandes Jorasses, el Piz Badile, Les Drus, el Cervino, la Cima Grande di Lavaredo y el Eiger.

     Antes de apasionarse por el mundo de la montaña y el alpinismo Rébuffat quería ser escritor, y se nota. Entre los libros escritos por alpinistas que he tenido la oportunidad de leer, Rébuffat es de largo el mejor narrador, el más virtuoso y también el más sencillo. Cada uno de los capítulos se inicia con una descripción de la montaña y nos introduce en la historia de los diferentes intentos realizados para alcanzar su cima: los fracasos, en ocasiones la tragedia, y siempre un triunfo final acaecido en los años treinta, cuando Rébuffat era un adolescente. Estas introducciones sencillas y brillantes son una de las mayores satisfacciones que proporciona Estrellas y borrascas. Tras la breve introducción  Rébuffat narra su propia experiencia al afrontar estas paredes norte, lo cual supone entrar en un mundo de vivencias y sensaciones, el encuentro de una actitud y sobre todo, de una relación generosa con el otro y el mundo de la montaña.

     Tal y como adelanta Lord John Hunt en el prólogo:

     «Lo que a mí me gustaba más del relato de estas bellas escaladas era que concedía más interés a sus compañeros, a la atmósfera de la gran ascensión, que a los problemas técnicos con los que se encontraba. Allí, delante de mí, tenía a un hombre enamorado de sus montañas, un gran artista, inconsciente de su gran valor.» 

     Esta aparente facilidad y una voz tan amable como la de Rébuffat hacen que esta  obra carezca de la dosis de esfuerzo más allá de los propios límites que acompaña a otros libros dedicados al alpinismo. Las virtudes de esta obra son tan numerosas que no echamos en falta una épica y, sin embargo, la encontraremos en su último episodio dedicado a la ascensión de la cara norte del Eiger. Quizás el más memorable. En él, la superación de adversidades más allá de lo previsible y la espléndida narrativa de Rébuffat  se dan la mano. Primero porque entrar en la historia de los intentos de ascender la enorme pared del Eiger es sobrecogedor. Siempre lo es. También porque una situación inesperada hace que nueve alpinistas de tres nacionalidades diferentes -el extraordinario Hermann Buhl entre ellos- compartan pared y cuerda durante los días que dura la ascensión bajo condiciones extraordinariamente adversas.

    Estrellas y borrascas de Gaston Rébuffat me parece un libro apasionante y de un extraordinario acento literario. Una magnífica lectura.

*

        «Así, de los sueños, nacen las grandes alegrías de nuestra vida. Los sueños son siempre necesarios. Los prefiero a los recuerdos.»

Gaston Rébuffat en la Aiguille du Rock